SES ALGUES 1
2021
Reforma integra de vivienda unifamiliar aislada con sótano y piscina en Formentera.

































El principal desafío del proyecto fue preservar la esencia de la construcción original, potenciando su carácter sin perder coherencia en la reforma. Para ello, se respeta la escala y geometría preexistentes y se eliminan los elementos que distorsionaban la visión del conjunto. De este modo, se recupera la pureza de las formas y se reorganizan los espacios exteriores, generando transiciones más fluidas entre arquitectura y el bosque de Formentera.
La piscina se redimensiona para garantizar mejor comunicación en el patio, que actúa como núcleo organizador de la vivienda. Este espacio central gana protagonismo al convertirse en el eje de conexión entre las distintas áreas de la casa. Más allá de su función como punto de encuentro, también mejora el confort térmico interior, favoreciendo la ventilación cruzada y proporcionando sombra en los meses más cálidos.
A nivel constructivo, la intervención respeta las características originales. Se conserva la cubierta plana y se mantiene la estructura de muros de carga, reforzando los nuevos cerramientos con muro de bloque o pilares de hormigón.
En cuanto a la envolvente, se propuso un revestimiento con aislante térmico incorporado bajo el acabado de mortero a la cal, para mejorar su comportamiento. Esto permite reducir la necesidad de climatización activa, disminuyendo los costes energéticos a largo plazo y mejorando el confort y la salubridad ambiental.
Se ha respetado la distribución interior original, introduciendo pequeñas variaciones para optimizar la circulación, mejorar el aprovechamiento del espacio y adaptarlo a las necesidades actuales del usuario. El salón se abre al patio central, reforzando su papel como eje articulador de la vivienda y generando una transición fluida entre interior y exterior. Los dormitorios, en cambio, se orientan hacia el perímetro de la parcela, garantizando mayor privacidad y conexión con el entorno inmediato. Para reforzar la coherencia del diseño, todo el mobiliario ha sido diseñado a medida, integrándose de forma orgánica con la arquitectura. De este modo se optimiza el uso de cada rincón de la vivienda, incorporando soluciones funcionales sin renunciar a la estética.
La selección de materiales responde a criterios de durabilidad, eficiencia y, como en el resto del proyecto, respeto por la tradición local. Se ha optado por una paleta sencilla pero expresiva, en la que cada material aporta textura y calidez sin perder coherencia. Los paramentos verticales se revisten con cal blanca, aportando luminosidad y continuidad visual, mientras que en los baños se introducen azulejos de colores que añaden un sutil contraste. Para los pavimentos, tanto interiores como exteriores, se elige una baldosa en tonos tierra, que suaviza la transición entre el interior y el exterior, diluyendo los límites entre ambos espacios.
Las carpinterías y la nueva pérgola están realizadas en madera de pino, clara, que no solo contribuye al confort térmico, sino que también aporta ligereza visual. En el exterior, los elementos en contacto con el suelo se revisten con piedra natural, generando la sensación de que la casa emerge de la propia roca del terreno.
Esta contención material no solo refuerza la coherencia estética del proyecto, sino que también facilita un mantenimiento más eficiente en las islas mediterráneas.



planta baja Vivienda













Sección Vivienda









planta Sótano Vivienda








